La atenuación acústica está determinada por el espesor de las lunas junto con la inclusión de las láminas de butiral con tratamiento acústico y la composición total del vidrio.
En estos vidrios, la lámina de butiral que se aloja entre las lunas de cristal tiene propiedades de atenuación acústica que proporcionan un mayor aislamiento al reducir la energía de la onda de sonido que viene del exterior.
Y en función de la composición del vidrio, podemos alcanzar atenuaciones acústicas desde 28 hasta 45 dB.