Los vidrios más utilizados en viviendas son los de doble acristalamiento, formados por dos lunas de vidrio (de 4, 5, 6, 8 ó 10 mm de espesor) separadas por una cámara de aire, que en PVC3 recomendamos que sea de 16 milímetros de grosor para aumentar el aislamiento térmico de la ventana.
Como el aire tiene una conductividad térmica de 0,025 W/(m.K) (a 10°C), mientras que la del vidrio es de 1 W/(m.K), la cámara de aire potencia las propiedades aislantes y reduce el valor U del acristalamiento. El valor U mide el intercambio de temperatura que se produce entre el exterior y el interior de la ventana. Cuanto menor es el valor U del perfil y el vidrio, mayor es la capacidad de aislamiento de la ventana.